Como testigo ha podido identificar a otras personas fotografiadas en ese viaje, posibilitando la investigación del contexto en el que se produjo
La consecuencia inesperada de este interés ha sido el afloramiento de fondos fotográficos privados sobre el evento. Uno de ellos, el de un pamplonés que viajó a NY como integrante del grupo de dantzaris y que como tal que estuvo presente aquel día en la Quinta Avenida. Tras saber la importancia de sus instantáneas y de otras que fue recopilando en aquel momento, ha decidido donar a la ciudad imágenes en papel de su colección personal sobre ese día, acompañadas de negativos.
Estas instantáneas pasarán a formar parte de la Fotototeca del Archivo Municipal que es una de los depósitos más demandados de este servicio municipal. El año pasado de los 17.770 documentos consultados el 80% fueron fotografías. Pamplona cuenta con un importante número de fondos y colecciones fotográficas sobre diversos aspectos de la ciudad y de la vida institucional y popular como son los 20.000 registros de la Colección Arazuri, el Fondo Fotográfico de Zubieta y Retegui -en proceso de organización- o el fondo producido por el propio Ayuntamiento y sus oficinas.
Mujeres dantzaris, pero sólo en el extranjero
Las fotografías donadas son 28 copias en blanco y negro, en papel, procedentes de varios reportajes distintos. Tienen diferentes tamaños que van desde los 11×8 cms de las más pequeñas a los 18×12 cms. de las más grandes. Los negativos son 19 acetatos, todos realizados por el donante, de los que algunos estaban aún sin positivar.
Además, el donante ha colaborado también con su testimonio a la hora de identificar a muchos de quienes aparecen en las fotos, algo que abre posibles vías de investigación para los técnicos del archivo que pueden contextualizar el viaje a través de los detalles presentes en las imágenes. En las instantáneas, por ejemplo, se puede apreciar la presencia de mujeres dantzaris del Grupo de Danzas Municipal documentando la costumbre de que, por entonces, las mujeres de ese grupo sólo actuaran en los viajes al extranjero. Además el conjunto de fotografías refleja otros aspectos como imágenes de situación (el edificio Empire State etc.).
Las nuevas imágenes, una vez organizadas, y descritas sumarán otros puntos de vista al del reportaje que ya custodiaba el archivo centrado en el desfile por el Día de la Hispanidad y que estaba atribuido a José Luis Larrión Arguiñano (entonces profesional en el rotativo ‘El Pensamiento Navarro’). Curiosamente tanto la primera serie en su integridad, como la segunda parcialmente, fueron procesadas (revelado, positivación y ampliación) en el mismo establecimiento: Foto Mena.
La importancia de la fotografía familiar
Además de la natural transferencia de documentación que generan las diversas oficinas del Ayuntamiento, la compra, la cesión y la donación de fotógrafos profesionales o aficionados y de los particulares, como es este caso, son distintas formas de incrementar el patrimonio fotográfico municipal.
Cuando un particular desea depositar o donar al Archivo Municipal fotografías producidas en su ámbito particular y familiar, con independencia de su soporte, se establecen por ambas partes condiciones específicas. Éstas afectan fundamentalmente al tratamiento técnico específico de conservación de los materiales, a la autorización o cesión de derechos, según el caso, que permita la realización de actividades de difusión, y a las garantías que permitan asegurar el acceso de los ciudadanos a este patrimonio, siempre con las limitaciones que puedan existir en relación con la propiedad intelectual y con la protección civil del derecho al honor, a la intimidad personal y familiar y a la propia imagen.
El Archivo Municipal ofrece, como contraprestación al particular, la conversión digital de las fotografías que integran el fondo o colección objeto de la donación.