El equipo de Educación Vial ha impartido 317 charlas para alumnado desde Infantil hasta Bachiller
Aprender a convivir en la vía pública con vehículos, peatones y ciclistas, respetar las normas de circulación y entender las indicaciones de agentes son algunos de los objetivos que persigue el programa de Educación Vial que Policía Municipal de Pamplona desarrolla en los centros escolares de la ciudad. Este curso, que ahora llega a su fin, han sido un total de 7.701 estudiantes los que han participado en alguna de las 317 charlas impartidas, tanto en las propias escuelas como en el Parque Polo de Volkswagen, con el que también colaboran.
Policía Municipal, que puso en marcha el programa de Educación Vial en 1990, cuenta con una unidad didáctica específica sobre la materia, adaptada a las distintas edades y cursos escolares. En ella, se pretende ahondar en la responsabilidad de cada persona en el espacio público en función del papel que juega en cada momento, si es peatón, si circula en un vehículo o si va en bicicleta o patinete. Para ello, realizan charlas, simulaciones y ejercicios prácticos en los propios centros y en el Parque Polo. Enseñan a identificar las señales de tráfico y las preferencias de paso, educan sobre cómo circula en bicicleta y, tras una formación más teórica, ponen en práctica lo aprendido a través de paseos por el entorno escolar o por la ciudad para visualizar, de forma real, la importancia de una correcta educación vial y crear buenos hábitos en cuanto a seguridad.
La mayoría de estas charlas se han dirigido a alumnado de Infantil y Primaria, si bien, también se han impartido talleres específicos para estudiantes de mayor edad y para personas con discapacidad. En los centros, se han ofrecido 233 actividades, en las que han participado 5.436 estudiantes. La actividad más demanda en los recintos escolares es el circuito con señales, que se realiza en los patios, en la que han participado 1.236 escolares. En ella toman un primer contacto con los peligros como peatón y como conductores de bicicletas o patinetes. Otras acciones realizadas pasan por paseos fuera del recinto escolar, charlas sobre cómo debe actuar un peatón y circuitos con semáforos. Además, 2.265 alumnos han recibido las nociones de circulación en el Parque Polo, a través de 84 actividades, en las que los escolares experimentan distintos roles, como el de peatón, el de conductor de kars o de bicicletas y el de pasajero.
Formación preventiva
Integrado dentro del Grupo de Educación para la Convivencia de Policía Municipal, el programa de Educación Vial busca transmitir conocimientos y resolver dudas, aportar habilidades y responsabilidad a la ciudadanía desde edades tempranas y acercarse al alumnado para ofrecer una formación preventiva y evitar así posibles situaciones de riesgos en la vía pública. Los centros escolares cada vez demandan en mayor medida estas actividades como complemento a la formación ordinaria en las aulas. No en vano, la Educación Vial consta como asignatura transversal en el currículo educativo.
Los cuatro agentes que integran el Grupo de Educación para la Convivencia, dos hombres y dos mujeres, son los encargados de transmitir entre los estudiantes ese mensaje de cuidado, precaución, atención y respeto a la circulación y al resto de personas en la vía pública. Lo hacen, en castellano y euskera, según la demanda, a través de dinámicas entretenidas que permitan captar la atención y el interés de los alumnos y alumnas, con indicaciones claras, que puedan poner en práctica en su día a día, y con las que puedan concienciar también a su propio entorno familiar.
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