Ya se han realizado los trabajos de albañilería y colocación de subestructuras, de forma que este espacio podría volver a acoger exposiciones a finales de febrero

La accesibilidad completa del Pabellón de Mixtos de la Ciudadela está ya un paso más cerca. Desde el pasado mes de septiembre se llevan a cabo trabajos para la eliminación de las barreras arquitectónicas en este espacio expositivo del Ayuntamiento de Pamplona. Las obras incluyen la modificación del acceso al edificio, la eliminación de desniveles y creación de rampas accesibles, así como la instalación de un ascensor en un edificio que hasta ahora solo contaba con una escalera de caracol para acceder a su planta superior. Hasta la fecha, se ha ejecutado ya la mayor parte del trabajo de albañilería y se ha colocado la subestructura que albergará el elevador. Tan solo resta su instalación, que se realizará en las próximas semanas para que pueda estar operativo a comienzos del próximo año. El objetivo es que vuelva a acoger exposiciones a partir del mes de febrero.

La Comisión de Presidencia ha visitado esta mañana la evolución de los trabajos, que fueron adjudicados a mediados de agosto a la empresa Construcciones Leache SL, por un importe de 175.246,04 euros (IVA incluido). Las obras comenzaron el mes de septiembre.

Una de las labores ya realizadas es la reforma del acceso. Se ha instalado la subestructura de la nueva cancela, que mejorará las condiciones térmicas del interior del edificio. La cancela alberga una puerta automática de vidrio al interior del edificio, una vez rebasada la puerta original exterior de madera exterior, que se conserva. Entre ambas puertas, en el espacio existente de 1,10 metros de fondo y 3,55 de ancho, se ha instalado una rampa para salvar el desnivel entre la vía pública y el interior del Pabellón de Mixtos, asegurando la accesibilidad universal. La puerta de vidrio es automática, facilitando el acceso y la salida a este espacio expositivo.

Además, se ha elevado la cota del hall de acceso al pabellón que existe una vez atravesada la puerta automática. Se ha eliminado así el escalón hasta ahora existente. Este trabajo se ha hecho recuperando el pavimento original de piedra.

El ascensor, en la nave colindante

Dadas las peculiaridades que presenta este edificio, la mejor solución para instalar un ascensor ha sido recurrir a la nave colindante. El edificio del siglo XVII, que en origen fue un almacén de víveres y bodega, se estructura en dos naves rectangulares yuxtapuestas, aunque al exterior solo se aprecia una.

El ascensor se instalará en la nave de la izquierda, justo tras superar el único acceso al Pabellón de Mixtos. Así, la nueva cancela de vidrio, que abrirá el espacio al interior, conectará también en su lado izquierdo con el nuevo ascensor. Para acceder a él ha sido necesario abrir un hueco en el muro de piedra que separa las dos naves. Además, se ha abierto otro hueco en la bóveda del edificio y se ha instalado la subestructura de acero que albergará el ascensor. De esta forma, está ya todo listo para recibir el elevador, algo que ocurrirá en las próximas semanas. Una vez instalado, se procederá a los remates finales de albañilería, para que este espacio pueda volver a acoger exposiciones a partir de febrero.

De hecho, el Pabellón de Mixtos de la Ciudadela es uno de los recintos expositivos más usados del Ayuntamiento, junto con la Sala de Armas, el Polvorín y el Horno. Dispone de 964,70 metros cuadrados útiles, que se reparten entre la zona de acceso, planta baja y primera planta. A los problemas del acceso en la entrada, se sumaba también una escalera de caracol para subir a la primera planta, como única alternativa, limitando considerablemente el acceso a la ciudadanía. Además, también para acceder a la planta baja había que sortear una decena de escalones para salvar un desnivel de 104 centímetros. Los trabajos realizados reafirman el compromiso del Ayuntamiento de Pamplona con las salas expositivas de la Ciudadela como espacios de mediación de la cultura contemporánea en la ciudad.