La campaña de este año tiene como lema #SomosInfinitos, en referencia a la diversidad y singularidad de las personas dentro del espectro autista

El Ayuntamiento de Pamplona ilumina el quiosco de la Plaza del Castillo este miércoles en color azul por el Día Mundial del Autismo. La celebración busca llamar la atención sobre el colectivo y lograr una mayor implicación de la sociedad en defensa de sus derechos. El autismo se presenta en multitud de formas y por ello precisa apoyos específicos para cada persona.

La campaña de este año tiene como lema #SomosInfinitos, en referencia a la diversidad y singularidad de las personas dentro del espectro autista. El objetivo es generar un cambio de actitud en la ciudadanía en pos de la tolerancia y respeto hacia las personas con autismo y sus familias. En Navarra, se calcula que hay unas 3.600 personas afectadas.

Los trastornos del espectro autista (TEA) son discapacidades del desarrollo causadas por diferencias en el cerebro. Aparecen en los primeros años de vida y afectan a las habilidades sociales y de comunicación. El trastorno también incluye patrones de conducta restringidos y repetitivos. No hay una causa única, si bien hay influencia genética y medioambiental.

En la actualidad, no existe una cura para los trastornos del espectro autista, aunque un tratamiento intensivo y temprano puede marcar una gran diferencia en la vida de muchos niñas y niños y mejorar el desarrollo del lenguaje, las habilidades y la conducta. Las personas afectadas no dejan de tener los síntomas, pero pueden aprender a manejarlos.

En Pamplona, la Asociación Navarra de Autismo celebra este sábado una jornada festiva para todos los públicos. La Plaza del Castillo acogerá, desde las 10.30 a 13 horas y de 17.30 a 19.30, hinchables y pintacaras, mesas de sensibilización, música, master class de zumba y concierto solidario del grupo Épsilon, entre otros.

La Asamblea General de la ONU eligió el 2 de abril como Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo en el año 2007, para promover los derechos humanos y las libertades fundamentales de las personas autistas, garantizando su participación igualitaria en la sociedad.